A dos centímetros del cielo

        Lo confieso una de mis debilidades es el chocolate, un alimento de dioses desde la cultura Maya, que llegó incluso a ser moneda de curso legal. Una dulce, amarga y picante delicia, depende de con qué se acompañe, que lleva a los golosos directos al cielo.

        Hace una semana tuve el placer de la mano de Pedro Rodríguez Dios , mejor cocinero del año en Canarias*, de disfrutar de un taller que tenía como protagonista los grandes vinos de Canarias, premiados en Agrocanarias 2012 acompañados de 6 postres realizados precisamente con chocolate como ingrediente principal. Un maridaje exquisito  que me llevó con un camino directo muy cerquita del cielo.

       Les paso a relatar la propuesta de armonía realizada por Pedro y comentada por Víctor Regalado, un gran sumellier.

     
       Mientras que esperábamos a que llegara todo el grupo invitado, varios compañeros de la prensa de Tenerife, abrimos boca con Momentos de Ferrera, un sutil blanco de la D.O Valle de Güímar. Mejor Imagen 2012 en Agrocanarias.

       Ya sentados a la mesa la sesión comenzó con Testamento Esencia 2008. D.O Abona, Medalla de Oro en el concurso que llegó de la mano de un dulce azafrán, cítrico miel, orejones gianduja. Fue tal el estado de abandono tras el primer bocado que incluso llegué a olvidar para qué había acudido al Mirador de Humbolt, no hice la foto correspondiente.  Así que por favor imagínenselo.

       Tras él llegó Stratus Moscatel Semidulce. Cosecha 2010. D.O Lanzarote. Medalla de Oro. Con él, una deliciosa tarrina de yogur, chocolate blanco y frambuesa elaborado con queso herreño.

       Pero no menos impresionada me quedé con Moscatel Rubicón 2011. D.O. Lanzarote, una dulce sensación en la boca que hacía eclosionar aún más los aromas y sabores ácidos y amargos del chocolate con leche y terciopelo de parchita.

       A esas alturas de degustación ya no era dueña de mis sentidos que se encontraba en una esfera superior.

        Para terminar Pedro inventó un corte perfecto de chocolate helado de jengibre y habas de cacao. Amargor y picantez que iban de la mano con la fuerza del Teneguía Malvasía Aromática. D.O La Palma. Gran Medalla de Oro Mejor Vino de Canarias. Y les aseguro que méritos para dicha distinción le sobran. Una de esas joyas que la combinación de nuestro clima y nuestras vides nos regalan.

  Pero Rodríguez Dios guardaba aún un as. En honor a Humbolt que da su nombre al nuevo proyecto que tiene entre manos nos regaló una sublime mezcla de sabores con un cremoso de caramelo salado con flor de sal de Fuencaliente y chocolate al 70% regado con Humbolt Tinto D.O Tacoronte Acentejo.

       Hace años que conozco a Pedro y no deja de sorprenderme. A su buen hacer en los fogones se une una mano sorprende para elaborar una repostería singular que no deja indiferente en el que los contraste se dan la mano y hacen que desde el ingrediente principal a el más delicado complemento tengan su protagonismo.

       Hubo tiempo aún para pequeños detalles con el  café en las que no faltaron las trufas ni las nubes de chocolate, brownies e incluso pastillas de frambuesa.

        ¿Qué quieren que les diga? Que aún hoy me relamo, sigo disfrutando con el placer que dejó la tarde almacenada en mi cerebro. La gastronomía está para ello para llevarnos a mundos increíbles, para hacernos viajar sin movernos de la mesa, para olvidar los pequeños problemas del día a día…y abandonarnos en las manos del placer.


*Premio Regional de restauración que concede la guía ¡Qué bueno!